Las declaraciones del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, sobre la ofensiva militar israelí en la Franja de Gaza y su apertura a reconocer un Estado palestino unilateral han provocado un cruce de declaraciones entre los ministros de Exteriores de ambos países. La reacción de Israel ha sido inmediata. El Ministerio de Asuntos Exteriores convocó a la embajadora española, Ana María Salomón Pérez, para traspasarle una «reprimenda» por las supuestas «falsas» afirmaciones por el presidente del Gobierno español y belga en el pasó de Rafá. El ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ha respondido a su homólogo israelí que «las acusaciones contra Sánchez son totalmente inaceptables». Además, ha confirmado que el Gobierno ha convocado a la embajadora de Israel en España, ya que las acusaciones de Israel «son especialmente graves» porque se dirigen contra el actual presidente de la UE.