El Gobierno de Reino Unido ha anunciado el envío de uno de sus destructores más avanzados, el HSM Diamond, a aguas del Golfo Pérsico y el océano Índico, una medida defendida como parte de los intereses para «mantener a salvo» el país. Su despliegue «reforzará las patrullas de la Marina Real y ayudará a mantener abiertas las rutas comerciales críticas», según un comunicado emitido por el Gobierno británico. Este refuerzo coincide con el fin de la tregua en Gaza, así como el previsible regreso de los ataques de Hezbolá en Líbano, los huthis de Yemen y de grupos proiranís en Irak y Siria en respuesta a los ataques israelíes en la Franja de Gaza.
