Al menos dos agentes de EEUU, destinados en la Embajada de su país en Madrid, parecen haber estado implicados en el soborno del Centro Nacional de Inteligencia (CNI). Por otro lado, también se ha sabido que la ministra de Defensa, Margarita Robles, convocó a su despacho tras el verano a la embajadora estadounidense, Julissa Reynoso, para pedirle explicaciones por una acción considerada hostil hacia un país aliado.