En un pronunciamiento inédito, la Corte Federal de Oakland, de California, ha considerado pertinente respaldar el fallo de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) que considera que hay pruebas verosímiles para investigar a Israel por genocidio y, aunque reconoce no tener jurisdicción sobre la política exterior estadounidense, sí «implora» al presidente Joe Biden y al secretario de Estado, Anthony Blinken, que «examinen los resultados de su apoyo inquebrantable al asedio militar contra los palestinos de Gaza». El juez Jeffrey White señala en su conclusión que «las pruebas indiscutibles ante esta Corte concuerdan con la conclusión de la Corte Internacional de Justicia e indican que el actual trato dado a los palestinos en Gaza por parte del Ejército israelí puede constituir de forma plausible un genocidio en violación del Derecho Internacional». Asimismo, también señala que «tanto los testimonios indiscutibles de los demandantes» como «el peritaje proporcionado por expertos» en genocidio, así como «las declaraciones hechas por varios oficiales del Gobierno israelí», indican que el asedio militar en curso en Gaza tiene como objetivo erradicar a todo un pueblo y por tanto cae de manera plausible dentro de la prohibición internacional contra el genocidio».