El Parlamento Europeo y los Estados miembros de la Unión Europea han llegado a un acuerdo que reforzará la solidaridad y las capacidades de detección, preparación y respuesta frente a amenazas e incidentes de ciberseguridad, aportando un «escudo europeo», compuesto por los centros de operaciones de seguridad nacionales y transfronterizos. El objetivo público es potenciar la respuesta conjunta de las crisis en la UE para garantizar un entorno digital seguro para los ciudadanos y las empresas. Además, se creará un mecanismo de emergencia para apoyar a los 27 ante incidentes cibernéticos, que incluye acciones preparatorias como test en sectores críticos, asistencia financiera mutua entre Estados miembros y, lo que desde Praefuturus consideramos muy reseñable por la gravedad de su importancia implícita, una reserva de ciberseguridad consistente en servicios privados que intervengan cuando una institución o Estado miembro lo solicite al ver desbordadas sus capacidades.