La NASA ha seleccionado los tres primeros experimentos científicos para su regreso tripulado a la Luna a una zona de aterrizaje todavía no decidida de su polo sur. Entre ellos se encuentra Lunar Effects on Agriculture Flora (LEAF), que estudiará cómo se comportan los cultivos espaciales en el ambiente lunar; otro de los experimentos científicos será el Lunar Environment Monitoring Station (LEMS), que llevará un monitoreo continuo y a largo plazo del medio sísmico a través de sismómetros autónomos; y el último será el Lunar Dielectric Analyzer (LDA), que mediará cambios dieléctricos y buscará volátiles lunares, especialmente formaciones de escarcha o depósitos de hielo.
