Un nuevo método innovador permite vincular la genética y la función de microbios individuales que viven sin respirar oxígeno en las profundidades de la superficie de la Tierra. Los hallazgos fueron publicados en «Proceedings of National Academy of Science» por un equipo de científicos dirigidos por investigadores del Laboratorio Bigelow de Ciencias Oceánicas. Su nuevo enfoque permitió descubrir que una especie de bacteria consumidora de sulfato, la Candidatus Desulforudis Auxdaviator, era no sólo un organismo más abundante sino también el más activo en un acuífero de agua subterránea del Valle de la Muerte, California, a cientos de metros bajo la superficie. De hecho, a pesar de que las tasas de actividad general fueron bajas en comparación con muestras de agua de mar, sí mostraron grandes diferencias en la actividad de los microbios individuales.