
La Presidencia de la Autoridad Palestina ha rechazado cualquier plan que implique el despliegue de una fuerza internacional en la Franja de Gaza tras la ofensiva militar israelí sobre el enclave palestino. «Una presencia extranjera sobre territorio palestino no tendría legitimidad alguna y solo el pueblo palestino puede decidir quién lo gobierna y gestiona sus asuntos», ha explicado Nabil abú Rudeina, portavoz del Presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbás. «No aceptaremos o permitiremos la presencia de (fuerzas de países extranjeros) en nuestro territorio, ya sea en Cisjordania o en la Franja de Gaza», ha dicho antes de recalcar que la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) es «el único representante legítimo del pueblo palestino, con jurisdicción legal sobre todo el territorio del Estado de Palestina».
Desde Praefuturus, creemos necesario recordar que este rechazo formal y público a la presencia de fuerzas internacionales por parte de la Autoridad Palestina se debe a presiones internacionales de algunos países occidentales, que han estado sondeando durante meses a las autoridades competentes de la ONU a través de una misión de cascos azules, así como a numerosos países árabes y africanos, para medir su disponibilidad a una participación de contingentes militares internacionales en un posible horizonte posterior a la invasión israelí en Gaza. Aparentemente, esta iniciativa había sido dejada a un lado ante la falta de interés o los recelos mostrados por la mayoría de las partes involucradas, pero es posible que los planes israelíes para invadir el sur del Líbano hayan obligado a los aliados y socios internacionales de Israel a activarla de nuevo.