La violencia de las pandillas, con tiroteos, ataques con explosivos y apuñalamientos, se ha expandido a Dinamarca. El ministro de Justicia danés, Peter Hummelgaard, ha asegurado que la Policia danesa ha registrado en los últimos cinco meses 15 casos en que los autores de actos criminales son de nacionalidad sueca (y la mayoría de ellos, menores de edad). Los criminales suecos son contratados por las redes delictivas danesas «para realizar el trabajo sucio» y cometer ataques, asesinatos y explosiones, según explicó el inspector de policía Torben Svarrer. Sin embargo, para hacer frente a la oleada de crímenes violentos, los ministros de Justicia de Suecia y Dinamarca se reunieron la semana pasada en Copenhague para mejorar la cooperación y las estrategias que utilizar para controlar la expansión de las bandas. Por su parte, la Policía noruega también teme que las pandillas suecas estén expandiéndose hacia Noruega, atraídas por el dinero y las nuevas rutas del tráfico de drogas en el norte de Europa.
