El FBI ha informado en un comunicado que hackers iraníes supuestamente habrían enviado al Partido Demócrata correos electrónicos con documentos y material robado a Donald Trump. Además, la agencia federal también ha informado de que no hay pruebas de que la campaña demócrata, entonces del presidente Biden, y ahora de Kamala Harris, respondiese al recibir ese material. Por otro lado, el FBI también ha informado que piratas informáticos habrían estado enviado material robado y privado de Trump a distintos medios estadounidenses. «Los actores extranjeros están aumentando sus actividades de influencia electoral a medida que nos acercamos a noviembre. En particular, Rusia, Irán y China», sostiene el FBI.
Desde Praefuturus, debemos resaltar que es un hecho histórico y bien conocido que las grandes potenciales han utilizado en el pasado y utilizan en el presente todas las herramientas y medios a su disposición para influir en las elecciones de otros países, mejorar su propia imagen en los medios de comunicación extranjeros, dominar las nuevas tecnologías de la información, crear ONGs (supuestamente independientes) con los que modificar la imagen percibida en rivales pero también en aliados o socios comerciales, desbancar a empresas de la competencia… Los ciudadanos tenemos que enfrentarnos a diario tanto a la propaganda amiga como a la propaganda enemiga, las dos igual de nocivas y eficaces a la hora de deformar nuestro criterio a su favor.
