
La futura Alta Representante de la Unión Europea para Política Exterior, Kaja Kallas, ha insistido en que la prioridad «para todos» es la «victoria» de Ucrania frente a la invasión rusa es una prioridad de su mandato, al tiempo que ha señalado al apoyo de China a Rusia. «Tiene que pagar el coste más alto» ha asegurado Kallas en referencia al Gobierno chino, tras asegurar que Pekín es cada vez más «un competidor y un rival sistémico» para la UE. En cuanto a la ofensiva de Israel en la Franja de Gaza y Líbano, Kallas se ha limitado a mostrarse partidaria de que todas las partes muestren contención y que se traten estos asuntos en el Consejo de Asociación, añadiendo además que la UE tiene que trabajar con Estados Unidos y los países del Golfo para lograr la paz en la región y trabajar en la reconstrucción, aunque ha mantenido de momento el apoyo comunitario a la fórmula de los dos Estados (palestino e israelí).
Desde Praefuturus, consideramos necesario recordar que la elección de este halcón de la guerra europeo como Alta Representante de la UE para Política Exterior no deja de ser un intento de imponer a la agenda política comunitaria una estrategia belicista tanto en Europa (para beneficio exclusivo de EEUU) como en Oriente Medio (para beneficio de Estados Unidos y de Israel). Quizá pronto nos obliguen a dejar de considerar este cargo como el máximo representante de la diplomacia europea. En cualquier caso, habrá que esperar a que el vencedor de las elecciones estadounidenses, Donald Trump, y su equipo, dejen clara su postura final en asuntos internacionales tras la futura toma de posesión como presidente de EEUU. Sólo entonces los funcionarios europeos podrán aclarar también su postura oficial sobre los graves problemas internacionales que ha dejado intencionadamente sin resolver la administración saliente de Joe Biden.