El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, ha iniciado una «planificaicón de ingeniería detallada» con la finalidad de construir una valla a lo largo de la frontera entre Jordania e Israel, justificando esta medida bajo la excusa de que Irán supuestamente pretende establecer un frente oriental contra Israel en Cisjordania, financiando y enviando armas a los milicianos desde Jordania.
Desde Praefuturus, consideramos poco creíble la excusa ofrecida por el ministro Katz, si recordamos que las autoridades jordanas han sido la máxima aliada de EEUU e Israel en la región, desde su derrota en la Guerra de los Seis Días. De hecho, su colaboración activa y pasiva con los organismos de inteligencia y seguridad de ambos países es constante, puesto que Jordania siempre ha sido conscientes de que su propia seguridad depende de esta colaboración forzosa. Tuvimos ejemplos actuales con el suministro de datos de inteligencia frente las represalias balísticas iraníes en el espacio aéreo jordano o los discursos grandilocuentes (sin medidas o sanciones reales) cuando la comunidad internacional comprobó que la ofensiva terrestre israelí de la Franja de Gaza era en realidad parte de una guerra de genocidio contra la población civil palestina.
No, nos tememos que la construcción de este muro de seguridad con Jordania sólo demuestra lo que ya venimos advirtiendo numerosas veces: la anexión de toda la Cisjordania palestina por parte de Israel, aislándola del resto del mundo para acelerar el proceso mediante hechos consumados.
