El balance de muertos a causa de un tiroteo masivo perpetrado el martes por un hombre en una escuela para adultos en la ciudad sueca de Orebro ha aumentado a diez, entre ellos el posible sospechoso. El número de heridos todavía no parece estar claro, según han indicado las autoridades suecas. A pesar de que por ahora se desconocen supuestamente los motivos de los sucesos, la policía ha apuntado a que «todo apunta a que el responsable actuó solo y sin un motivo ideológico». Apenas unos días antes, el primer ministro de Suecia, Ulf Kristerrson, reconocía públicamente que su país atravesaba una «oleada de violencia» para la que el propio Gobierno sueco no tenía respuesta alguna.
