03/11/2025

La invasión de Ucrania era el último capítulo de una guerra subsidiaria entre Rusia y EEUU. Si bien es cierto que Ucrania lleva tres años invadida por tropas de Moscú, la realidad es que Europa lleva ochenta años invadida por la agenda geopolítica de EEUU, colonizada por sus bases militares y subordinada a los caprichos de sus mercados. Paradójicamente, la Europa que ayer demonizaba la paz, hoy aprieta los puñitos incapaz de asumir su propia irrelevancia. Más paradójico aún, los mismos que pedían dinero para la guerra durante casi tres años, piden ahora dinero para la paz. Por eso, debemos exigir que guarden silencio y abandonen definitivamente la estrategia suicida a la que nos conducían.

Desde Praefuturus, no podemos sino estar completamente de acuerdo con los argumentos y conclusiones de este artículo, cuya lectura original recomendamos encarecidamente. Desgraciadamente, la propaganda amiga no sólo ha hecho un magnífico trabajo distorsionando la visión de la misma realidad en la guerra proxy entre Rusia y Estados Unidos, sino que también ha lisiado mentalmente (hablando figuradamente) a la mayoría de las personas sometidas a esta hipnosis colectiva diaria (ídem).

Es hora de la autocrítica. Es hora de exigir responsabilidades políticas a nuestros líderes e instituciones comunitarias (tan cómplices como fueron con Biden como lo serán con Trump, a pesar de las apariencias públicas). No hay otro camino, si realmente queremos dejar de ser una gigantesca colonia de EEUU de una vez por todas.

https://www.publico.es/opinion/columnas/europanolis.html