
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha ignorado la petición de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, de reunirse de su toma de posesión del cargo y ahora, el secretario de Estado, Marco Rubio, ha dado plantón a la alta representante de la UE, Kaja Kallas. La estonia iba a reunirse con Rubio para abordar la relación bilateral, pero una vez allí, la cita se ha cancelado por un supuesto problema de agenda. Es más el presidente Trump ha vuelto a insistir en imponer aranceles del 25 a la Unión Europea. Sin embargo, el plantón del secretario Rubio llega un par de días después de que el presidente estadounidense recibiera a su homólogo francés, Emmanuel Macron, para abordar el fin de la guerra en Ucrania.
Desde Praefuturus, debemos resaltar que los desplantes de la administración a Ursula von der Leyen y Kaja Kallas (dos conocidas halcones de la guerra que se han manifestado públicamente en contra de cualquier tregua o acuerdo de alto el fuego con Rusia) tiene varios objetivos. Por un lado, busca erosionar y minar a la propia UE como rival comercial, favoreciendo su lugar conversaciones directas únicamente con países individuales. Por otro, está reforzando las presiones internas y externas, para que los halcones de la guerra de nuestro bando reconozcan la realidad de los hechos, dejando de tratar de torpedear las negociaciones directas entre las grandes potencias, Rusia y EEUU, aunque se está dejando cierto espacio para pequeñas concesiones a los excluidos en los grandes acuerdos fuera de los focos.
Para impulsar estos propósitos, EEUU está utilizando los aranceles como una amenaza diaria y arma de presión constante ante una UE muy debilitada económicamente, que no puede hacer nada pese a las bravatas públicas de algunos de sus líderes.