
El magnate Elon Musk ha anunciado que su tiempo como «empleado especial del Gobierno» de Donald Trump, donde dirige el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) «llega a su fin», apenas un día después de haber reconocido su «decepción» con el proyecto de reforma fiscal del inquilino del presidente estadounidense, al considerarlo insuficiente y poner en riesgo su trabajo en el controvertido puesto que ocupaba.