El vicepresidente del Parlamento israelí, Nissim Vaturi, se ha mostrado a favor de «quemar Gaza» en represalia por el secuestro de los 240 rehenes que permanecen retenidos por Hamás en la Franja de Gaza. «Somos demasiado buenos», ha señalado en la red social X, instando a que no se permita la entrada de agua ni combustible hasta que se produzca la liberación de todos los rehenes. No es el primer político perteneciente al actual Gobierno israelí que se manifiesta con declaraciones tan extremistas. El todavía ministro israelí de Patrimonio, Amihai Eliyahu, ya se había expresado en términos incluso más inhumanos al asegurar en una entrevista que el lanzamiento de una bomba nuclear en la Franja de Gaza podría ser «una opción» del Gobierno de Israel para acabar permanentemente con Hamás.