Una investigación que tiene por título «Trading on terror?» señala que algunos inversores desconocidos sabían con antelación el ataque de Hamás a Israel y sacaron provecho en la Bolsa. Los investigadores de la Universidad de New York y de la Universidad de Columbia documentan «un aumento significativo de las posiciones cortas en decenas de empresas israelíes que cotizan en Tel Aviv» durante las semanas previas a los ataques. Además, Robert J. Jackson y Joshua Mitts, los coautores de la investigación, afirman que están «muy seguros» de que la actividad comercial es «excepcional» y «extraordinaria» en más de una década de negociaciones previas. «Vincularlo con Hamás es muy especulativo y no estamos sugiriendo eso. Hay una amplia gama de posibilidades», sugieren en su estudio. Finalmente, ambos concluyeron que «sólo estamos viendo la punta del iceberg. Hay muchas más cosas que no podemos detectar pero que los reguladores deberían considerar».