El presidente de Benín, Patrice Talon, ha cambiado su postura respecto a las relaciones bilaterales con Níger y ha manifestado su de «deseo» de normalizar las relaciones entre ambos. Tras el golpe de estado de Níger en el julio pasado, Benín mostró a principios de agosto su disposición de enviar fuerzas militares a Níger en caso de que la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) decidiera implementar una intervención militar para reinstaurar al depuesto Gobierno nigeriano del ahora expresidente Mohamed Bazoum. Esa posibilidad hizo que Malí y Burkina Faso advirtiesen que tomarían dicha intervención militar como una declaración de guerra y que ayudarían a Níger a defenderse.