«No hay conflicto franco-alemán, estamos de acuerdo en el ochenta por ciento de las cuestiones», ha explicado el ministro de Asuntos Exteriores de Francia, Stéphane Séjourné, en una entrevista. Asimismo, también ha agregado que el objetivo de Francia no es otro que «derrotar a Rusia, sin hacer la guerra a Rusia». Unas aclaraciones que vienen a confirmar el viraje público del ejecutivo francés tras las polémicas declaraciones de Macron, en las que el presidente galo aseguró que no descartaba el envío de tropas occidentales a Ucrania. Al no encontrar respaldo público de ningún otro líder europeo, el Gobierno tuvo que «matizar» al día siguiente la interpretación de las palabras del presidente francés. Sin embargo, las crecientes discrepancias también aluden al apoyo material a Ucrania de ambos países: Alemania no ha aceptado la reciente petición ucraniana de entregarle misiles de crucero Taurus, mientras que, muy al contrario, Francia ha ofrecido sus misiles SCALP, que son de capacidades similares a los alemanes.