Tras cinco meses de conflicto, más de 31.000 civiles palestinos muertos y una hambruna devastadora entre la población gazatí, los líderes de los Veintisiete jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea han pedido por primera vez un alto el fuego en Gaza bajo la fórmula consensuada de hacer una «pausa humanitaria inmediata que lleve a un alto el fuego sostenible». También han pedido la liberación de todos los rehenes en manos de Hamás y la entrada de la ayuda humanitaria en la Franja de Gaza. Este anuncio público y consensuado llega bajo el paraguas de Estados Unidos, que hizo varias declaraciones esta semana en sentido (llegando a informar que llevaría su nuevo plan de alto el fuego al Consejo de Seguridad). Desde Praefuturus, queremos señalar que, a pesar de que aparentemente la presión internacional sobre Israel por fin parece estar dando sus frutos, lo cierto es ni Estados Unidos ni la mayoría de los Estados miembros de la Unión Europea quieren pasar a la toma de acciones reales, como las repercusiones económicas y comerciales por su completa vulneración de los derechos humanos, tan empleadas por mucho menos en la lucha por el poder mundial que estamos viviendo en la actualidad.