El presidente ruso, Vladimir Putin, y el líder de la junta militar de Malí, Assimi Goita, han acordado «intensificar la cooperación» en los lazos bilaterales a nivel de lucha contra el terrorismo, así como fortalecer las relaciones en varios sectores, entre ellos la energía, la agricultura y la minería, en el marco de la creciente alianza entre Rusia y Malí. «Goita ha expresado su agradecimiento especial por las entregas gratuitas de maíz, fertilizantes y combustible por parte de Rusia», ha expresado el Kremlin en un comunicado en su página web. Desde Praefuturus, ya venimos avisando desde el año pasado de esta confluencia de intereses comunes entre Rusia y Malí, Níger y Burkina Faso, que ha llevado al debilitamiento de la influencia neocolonialista francesa en toda la región, así como a la expulsión de las tropas francesas y estadounidenses en Níger, como ejemplo ilustrativo. No obstante, las primeras señales de esta pérdida de influencia neocolonial ya se habían tomado forma públicamente con la salida conjunta de estos países centroafricanos de la CEDEAO para formar su propia Alianza de los Países del Sahel.