Naciones Unidas ha afirmado que el uso de bombas pesadas por parte del Ejército de Israel en el marco de su ofensiva contra la Franja de Gaza genera «graves preocupaciones» en torno a las posibles violaciones de las leyes de la guerra debido al «elevado de número de víctimas civiles» y a la «destrucción generalizada» causada por estos ataques. «El requisito de seleccionar medios y métodos de guerra que eviten o al menos minimicen en toda medida los daños civiles parece haber sido violado sistemáticamente en la campaña de bombardeos de Israel», ha señalado el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Turk.
