Este lunes comienza la décima conferencia internacional de Estados firmantes del Tratado de Comercio de Armas (TCA) reunidos en Ginebra (Suiza). Sin embargo, las ventas de material armamentístico al Estado israelí suponen una vez más una gravísima vulneración de lo acordado en los artículos referentes a prevenir la venta de armas a países que violan los derechos humanos. En concreto, el TCA establece que los firmantes no autorizarán «ninguna transferencia de armas convencionales» a aquellos países donde «podrían utilizarse para cometer genocidio, crímenes de lesa humanidad , infracciones graves de los convenios de Ginebra de 1.949». No obstante, pese a estas claras especificaciones, el comercio de armas con Israel, responsable de la muerte de un altísimo número de civiles palestinos en la Franja de Gaza, sigue su curso con una absoluta normalidad hasta la fecha.
