En respuesta a la intención de las autoridades turcas de unirse al grupo de economías emergentes de los BRICS ante la falta de avances en su integración europea desde 2.006, la UE ha señalado que los BRICS tienen objetivos «totalemente distintos» al bloque europeo «en objetivos, en estructuras o en reglas de organización». Fue el portavoz de Exteriores de la Unión Europea quien explicó que las autoridades europeas esperan que los candidatos a la adhesión apoyen los valores europeos, además de cumplir con sus obligaciones en el marco de los acuerdos comerciales y de alinearse con la política exterior de la Unión Europea.
Desde Praefuturus, consideramos necesario aclarar que la solicitud turca de ingreso en la Unión Europea ha sido la más larga de cualquier negociación de adhesión en la historia de la UE de forma intencionada. La UE siempre ha jugado una política del palo y la zanahoria para tratar de someter a este incómodo e independiente aliado de la OTAN, con demasiada influencia en el Mediterráneo Oriental, Medio Oriente e incluso África como para desdeñarlo sin más. No obstante, es una señal muy fidedigna de los nuevos y peligrosos tiempos el que un portavoz de las instituciones comunitarias explique directamente que no se puede pertenecer a los dos grupos económicos al mismo tiempo (y toda una amenaza pública a otros países que traten de alinearse incorrectamente en esta pugna por la hegemonía global).
