El Parlamento Europea ha pedido con 425 votos a favor, 131 en contra y 63 abstenciones a los Veintisiete retirar las restricciones sobre Ucrania para atacar territorio ruso con armas occidentales suministradas por países occidentales. Además, también se les ha pedido que entreguen armamento, sistemas de defensa aérea y municiones. Por otro lado, también se reafirma la importancia de que todos los países de la UE y los aliados de la OTAN se comprometan de forma «colectiva e individual» a prestar apoyo militar a Ucrania por encima del 0,25% del PIB. Además, se ha hecho hincapié en la importancia de confiscar activos estatales rusos «para compensar a Ucrania por la destrucción».
Desde Praefuturus, debemos resaltar el hecho de que cuando en esta noticia se habla de armas occidentales, está incluyendo específicamente los misiles a larga distancia para atacar territorio ruso, que ya fueron entregados a Ucrania por EEUU y otros países de la OTAN hace algunos meses con la prohibición de usarlos hasta que supuestamente la administración Biden diese el visto bueno. Así pues, cuando inevitablemente los Veintisiete aprueben estas peticiones de la Eurocámara, y lo harán si no sienten una presión de la ciudadana fuerte contra los Gobiernos de la UE, nos estarán metiendo de facto no ya en un conflicto militar proxy entre Rusia y Ucrania, sino en un conflicto directo y muy real entre Rusia y la OTAN, por un país, Ucrania, que recordemos no pertene ni a la OTAN ni a la UE; por un país, al que primero sólo íbamos a ayudar a defenderse de una invasión, luego nos obligaron a cambiar nuestra economía de mercado europea por una economía de guerra para sostener el inmenso esfuerzo bélico «ucraniano» y ahora esos mismos líderes se presión entre ellos para ser los primeros en iniciar una escalada de un conflicto bélico que pondrá en peligro todas nuestras vidas en favor de la supervivencia hegemónica de grandes potencias en crisis (Estados Unidos y Reino Unido).
