
El Ejército de Israel ha atacado varios pasos fronterizos (Al Arid, Matraba, Salé y Qalesh) situados entre Líbano y Siria, con la excusa de evitar «la transferencia de armas» hacia Hezbolá. Por su parte, el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) afirmó que miles de familias están huyendo hacia Siria y afirmó que cientos de vehículos se encuentran atascados en la frontera.