
«Los combates en Gaza que empezaron hace un año se han propagado ahora a Líbano y otros países en la región se han visto afectados», ha afirmado el presidente de Rusia, Vladimir Putin, durante la cumbre los BRICS en la ciudad rusa de Kazán. «El nivel de confrontación entre Irán e Israel ha aumentado drásticamente. Todo parece una reacción en cadena que pone a todo Oriente Próximo al borde de una guerra a gran escala», ha sostenido el presidente ruso, que también ha manifestado que «corregir la injusticia histórica hacia el pueblo palestino puede garantizar la paz en Oriente Próximo». Asimismo, Putin también ha explicado que, mientras no haya una solución sobre este tema, «el círculo vicioso de la violencia no puede romperse».