Con unos 44.000 muertos en la Franja de Gaza después de más de un año de guerra genocida contra la población civil palestina en la Franja de Gaza, el todavía alto reprentante de la UE para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, propondra a los 27 ministros de Exteriores este lunes romper el diálogo político con Israel y prohibir la importación de productos procedentes de los asentamientos ilegales israelíes. Esta medida, que requiere de completa unaminidad para salir adelante, tiene pocos visos de prosperar por la férrea resistencia de los aliados europeos de Israel, entre los que se encuentran Alemania, Austria o Hungría, frente a países comunitarios como España o Irlanda que sí han solicitado de «forma urgente» una revisión del Acuerdo de Asociación UE-Israel. Por su parte, la reelegida presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, apartó inmediatamente ese tipo de iniciativas de la agenda oficial europa en el pasado y no se espera que la sustituta que ha escogido para Borrell, la estonia Kaja Kallas, mantenga el mismo curso de acción que el alto representante saliente.
