
El primer ministro eslovaco, Robert Fico, se reunió el domingo con el presidente de Rusia, Vladímir Putin, en una visita sorpresa en la que se han abordado varios temas como la continuidad del suministro de gas ruso a Eslovaquia una vez que Ucrania corte el paso por su territorio a partir de enero de 2025, el rechazo a unas posibles nuevas sanciones europeas contra el suministro energético nuclear ruso, la guerra de Ucrania, la posibilidad de un final próximo a dicho conflicto o el estado actual de las relaciones mutuas entre Eslovaquia y Rusia.
Desde Praefuturus, debemos recordar que tanto el primer ministro eslovaco, Robert Fico, como su homólogo húngaro, Viktor Orbán, son de los pocos líderes dentro de la Unión Europea que se han manifestado públicamente en contra del papel de la UE en la guerra proxy ucraniana entre la OTAN y Rusia. También han sido de las pocas voces capaces de mostrar su firme oposición a la política de las sanciones económicas que tanto daño han hecho a la economía de la propia UE, por lo que esta visita revierte de una importancia especial para los bandos implicados, sobre todo si tenemos en cuenta que el propio Fico sufrió un intento de asesinato el 15 de mayo de 2024 por defender la neutralidad y los intereses estratégicos de su país.