
El Consejo de Seguridad de la ONU se reunirá de urgencia, a petición de varios Estados miembros, para analizar la matanza ocurrida en el oeste de Siria en las últimas 72 horas, que han dejado unos 973 fallecidos entre la población civil. Supuestamente, la masacre se produjo como respuesta de grupos leales al derrocado presidente Bachar al Asad contra las fuerzas de seguridad del nuevo Gobierno sirio. Por su parte, el alto comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos afirmó ayer domingo haber recibido informes sobre Siria donde se estaban produciendo ejecuciones sumarias con trasfondo sectario.