El presidente estadounidense, Donald Trump, y su homólogo ruso, Vladímir Putin, han acordado que el camino hacia la paz empezará con un alto el fuego temporal de 30 días que sólo proteja a las infraestructuras energéticas ucranianas. A cambio, el mandatario ruso habría exigido el cese de toda ayuda militar extranjera a Ucrania. Además, Putin también planteó varias dudas «significativas» acerca de la verificación del alto el fuego en los 2.000 km de frente, la necesidad de suspender la movilización forzosa en el país vecino y el rearme del Ejército ucraniano. Además, el presidente ruso también acusó a las autoridades ucranianas de ser incapaces de cumplir los acuerdos alcanzados en el pasado y transmitió a Trump el riesgo de que esto se repita. «Ambos líderes coincidieron en que este conflicto debe concluir con una paz duradera», señala la nota conjunta publicada tras la llamada entre los mandatarios.
Por otro lado, Oriente Medio también ha ocupado una parte de las conversaciones como una región de potencial cooperación para prevenir futuros conflictos, coincidiendo en la necesidad de detener la necesidad de armas estratégicas en la región y en que «Irán nunca debería estar en condiciones de destruir a Israel».
