
El gabinete de seguridad de Israel aprobó el establecimiento de la llamada dirección de migración, un nuevo organismo que gestionará la «transferencia voluntaria» de los residentes de Gaza a un tercer país. Concretamente, el ministro de Defensa israelí, Israel Katz, ha sostenido que esta nueva dirección de migración, que quedará bajo su mando, está «sujeta al derecho israelí e internacional», pese a que la ONU ha advertido en numerosas ocasiones que «toda deportación de territorio ocupado está prohibida». «Estamos trabajando por todos los medios para implementar la propuesta del presidente estadounidense y permitiremos que cualquier residente de Gaza que quiera mudarse a un tercer estado lo haga», señaló el propio Katz tratando de imponer sus propios respaldos internacionales a esta medida.