
La alcaldesa demócrata de Los Ángeles, Karen Bass, ha anunciado que entrará en vigor el toque de queda en el centro de la ciudad a partir de esta noche, como respuesta al aumento de tensiones en las manifestaciones, tras las recientes redadas migratorias y el despliegue de casi 5.000 efectivos de la Guardia Nacional de California. Bass aseguró que aún no ha definido cuánto tiempo durará el toque de queda, aunque se prevé que serán varios días ante la continuación de los disturbios y actos vandálicos nocturnos por parte de grupos que se niegan a dispersarse. «Hemos asistido a una preocupante escalada y a un comportamiento ilegal y peligroso», señaló por su parte Jim McDonnell, jefe del Departamento de Policía de Los Ángeles.