
Las autoridades de Omán, que ejercen de mediadoras en las conversaciones entre Irán y EEUU sobre el programa nuclear iraní, han acusado al Gobierno israelí de «intentar obstruir de forma deliberada el proceso diplomático y provocar un conflicto». En concreto, el ministro de Exteriores omaní, Bdar al Busaidi, ha señalado que este ataque «revela una intención deliberada de obstruir el proceso diplomático y provocar un conflicto amplio que tendrá graves consecuencias para la paz regional e internacional».