
El presidente de Polonia, Andrzej Duda, ha negado las acusaciones vertidas en su contra por parte del ex jefe de los servicios de Inteligencia alemanes, August Hanning, quien ha acusado al mandatario polaco de apoyar a su homólogo ucraniano, Volodimir Zelenski, en el sabotaje de los gaseoductos Nord Stream en el mar Báltico durante el pasado mes de septiembre de 2.022. Acusaciones como estas confirmaron las pesquisas de la Fiscalía alemana desde mediados de agosto.
Desde Praefuturus, consideramos bastante indignantes las explicaciones ofrecidas por el presidente polaco al asegurar «Para nadie es un secreto que los gaseoductos Nord Stream 1 y 2 servían a los intereses ruso-germanos. Que nadie diga que se trataba de la seguridad energética para Europa, al contrario, era un peligro. Cualquiera que conozca el mercado energético del gas lo sabe muy bien». Los brutales y constantes incrementos de los precios en el mercado energético que hemos sufrido todos los países europeos desde ese terrible acto de sabotaje, cuya autoría supuestamente nadie conoce en uno de los mares más vigilados por la mejor tecnología puntera y satelital de la actual alianza militar más grande del mundo (la OTAN) son la prueba pública más irrefutable ante tanta falacia demagógica polaca-ucraniana y la propaganda amiga procedente de Estados Unidos y Reino Unido.