El candidato regional del Partido Socialdemócrata (SPD) y primer ministro del estado de Brandenburgo, Dietmar Woidke, consiguió imponerse con un 31,2% a Alternativa para Alemania (AfD), que consiguió un 29,8%. A continuación, destacaron ayer la Alianza Sahra Wagenknecht (Por la Razón y la Justicia o BSW) con un 12,1%, la Unión Cristiano Demócrata (CDU) con un 11,8% y Los Verdes con un ajustado 5%. Por su parte, se quedarían por debajo del umbral mínimo de votos para conseguir representación parlamentaria en el parlamento de Brandenburgo, La Izquierda con un 3,1% y Votantes Libres (BVB) con un 2,6%. En cuanto a la participación, se estima que fue en torno al 74%, muy por encima del 61,3% de las mismas elecciones en 2.019.
Desde Praefuturus, consideramos necesario señalar que, aunque el estado alemán de Brandenburgo tan sólo cuenta con 2,1 millones de votantes, estas elecciones regionales han sido cruciales desde el punto de vista mediático y de los tradicionales equilibrios de poderes después de los resultados históricos de la ultraderecha de Alternativa por Alemania (AfD) tanto en las pasadas elecciones legislativas de la Unión Europea como en las recientes elecciones regionales de Sajonia y Turingia. Sin embargo, es evidente que ésta ha sido una víctoria pírrica en el mejor de los casos: el SPD se ha impuesto por la mínima, ganando más tiempo y cierta apariencia de respaldo popular, mientras que AfD sigue creciendo en un país atrapado por un cúmulo de factores lesivos (internos y externos) junto con la sombra de una gran guerra internacional impuesta por Estados Unidos, Reino Unido y la OTAN como supuesta panacea para todos nuestros problemas.
